Después de más de tres décadas de búsqueda internacional, las autoridades lograron la captura de Ali Zaki Hage Jalil, ciudadano libanés señalado como principal sospechoso del atentado aéreo ocurrido en Panamá en 1994. Su detención, realizada el pasado 6 de noviembre en la Isla de Margarita, estado Nueva Esparta (Venezuela), cierra una larga persecución judicial impulsada por agencias internacionales y organismos de inteligencia de varios países.La localización de Hage Jalil fue posible gracias a información entregada por diferentes agencias, pero EL TIEMPO reveló en noviembre de 2022, el testimonio de un ingeniero venezolano que vivía en Bogotá quien aseguró haber trabajado en la recopilación de datos sobre el paradero del fugitivo y esta información la puso en conocimiento de las autoridades colombianas. En su momento, la Unidad Investigativa de este diario señaló que este ciudadano poseía material inédito sobre uno de los hombres más buscados por el FBI, incluidos registros financieros, propiedades, números telefónicos y fotografías recientes obtenidas entre 2018 y 2021.De acuerdo con el dosier presentado por el ingeniero ante la Fiscalía colombiana el 27 de julio pasado, la información fue recabada durante varias misiones que se desarrollaron en territorio venezolano. “Terminé tomando en arriendo un cuarto en la casa de un sargento segundo del Ejército colombiano que me contactó con uno de sus excompañeros. Este me dijo que necesitaba hacer unas verificaciones en Venezuela para un trabajo periodístico y que me iba a pagar bien”, relató el denunciante en su testimonioe entregado a este diario.Esta es una de las fotografías de Ali Zaki que el ingeniero venezolano asegura haber obtenido. Foto:SuministradaEl objetivo inicial, según su versión, consistía en verificar si un ciudadano de origen libanés y con nacionalidad venezolana se encontraba efectivamente viviendo en Isla Margarita. “Me pidió buscar y tomar fotos de Ali Hage Zaki Jalil. Lo ubiqué, en 2018, en uno de los tres gastrobares que tiene allí y empecé a ganarme su confianza”, declaró el hombre. .Los registros que entregó muestran imágenes de Hage Jalil con su familia en playas y oficinas de la isla, material que coincide con la descripción del sospechoso publicada por el FBI en una circular de agosto de 2020, cuando se solicitó información internacional sobre su paradero. La aparición de nuevas fotografías y documentos en manos del denunciante habría contribuido a reactivar los mecanismos de búsqueda.Esta fotografía de Ali Zaki, es una de las pruebas que entregó el venezolano. Foto:SuministradaEl ingeniero afirmó además que, dentro de las tareas que le asignaron, tuvo que comprar una vivienda cerca de una torre de telefonía para instalar un dispositivo de interconexión de redes de internet que, en realidad, funcionaba como receptor de señales de celular. Según su testimonio, el aparato fue parte del trabajo que le encargaron desde Colombia y entregó fotografías del equipo como parte del material probatorio.La detención de Ali Zaki Hage Jalil representa un hecho relevante en el seguimiento del caso del atentado de 1994, en el que murieron empresarios de la comunidad judía panameña. La cooperación entre agencias de varios países permitió dar con el paradero del fugitivo, quien permaneció 31 años fuera del alcance de las autoridades.Redacción JusticiaJusticia@eltiempo.comMás noticias de Justicia:

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